Emborracharse no sustituye la falta de compañía, pues de soledad te llenas conforme la botella se vacía.
lunes, 28 de enero de 2013
Gran verdad.
He aprendido que los amores, pueden llegar por sorpresa o terminar en una noche. Que grandísimos amigos pueden volverse grandísimos desconocidos, y que por el contrario, un desconocido puede volverse alguien inseparable. Que el "nunca más" , nunca se cumple, y que el "para siempre" siempre termina. Que el que quiere, lo puede, lo sigue, lo logra y lo consigue. Que el que arriesga no pierde nada, y el que no arriesga, no gana. Que el físico atrae, pero la personalidad enamora. Que si quieres ver a alguien, díselo, mañana sera tarde. Que el sentir dolor es inevitable, pero sufrir es opcional. Y sobre todo, he aprendido que no sirve de absolutamente nada, seguir negando lo evidente.