miércoles, 30 de enero de 2013

Hasta los infinitos se rompen.

¿Para siempre? ¿Siempre? Lo único que sé es que siempre es demasiado tiempo para cumplirlo, pero no vamos a negar que suena bonito, "para siempre". Nada es para siempre, el sol no brillara para siempre, ni las estrellas estarán ahí para siempre, tú no sonreirás para siempre, ni estarás feliz siempre, ni amarás para siempre, ni vivirás para siempre, ni siquiera tú serás tú para siempre. Es una bonita palabra para quedar bien, un bonito sueño, pero sólo eso. Nada es para siempre, siempre todo tiene su final.